La Danza de Moros y Cristianos es una tradición arraigada en la vida de Diego Rodríguez López, un apasionado de 69 años. Con un legado que se remonta a generaciones pasadas, este grupo de danza es mucho más que un simple conjunto artístico. Descubre cómo Don Diego y su equipo trabajan incansablemente para preservar nuestras raíces culturales.
El legado que perdura:
Don Diego Rodríguez López lleva la batuta de la Danza de Moros y Cristianos durante más de un cuarto de siglo. Sin embargo, esta tradición se remonta a tiempos inmemoriales, ya que sus abuelos y padres también formaban parte de ella. En este emocionante viaje, conoceremos cómo esta danza ha perdurado a lo largo de los años.
Un Compromiso Inter generacional:
En el grupo de Don Diego, la danza no entiende de edades. Bailadores de todas las generaciones, desde niños hasta adultos, se unen para mantener viva esta rica herencia. Algunos, que comenzaron como bailarines, ahora se convierten en maestros del grupo. Todo esto se hace sin fines lucrativos, ya que el objetivo principal es transmitir nuestros valores culturales a la comunidad lingüística aguacateca, especialmente a los jóvenes que deben conocer nuestra historia y cosmovisión.
La Magia de las presentaciones:
Cuando el grupo se presenta, lo hace con la vestimenta tradicional de moros y cristianos, acompañados del resonar del tambor y el pito. Sin embargo, detrás de esta apariencia colorida se encuentra un ensayo constante. Los bailadores deben estar perfectamente orientados en sus movimientos y tener la habilidad de manejar su energía, ya que a veces pasan horas sobre el escenario.
Un grupo sin fronteras:
Los integrantes del grupo de danza no se limitan al cantón Aguacatán, ya que provienen de comunidades cercanas, como del río San Juan. Su círculo de actuación se extiende por toda la comunidad lingüística aguacateca, participando en festividades clave, como la celebración del día de la Virgen de la Encarnación y de la Asunción, así como en otras actividades de gran importancia para la comunidad.
Un futuro en construcción:
A pesar de la incertidumbre sobre la fecha exacta de formación del grupo, Don Diego Rodríguez López tiene una visión clara: guiarlo durante muchos años más. Además, se dedica a preparar a sus sucesores, asegurando que esta tradición perdure y siga inspirando a las generaciones futuras.
La danza de Moros y Cristianos, es una joya cultural que sigue brillando en la comunidad lingüística aguacateca. Con su dedicación y pasión, esta tradición se mantendrá viva por generaciones venideras, recordándonos la importancia de preservar nuestras raíces culturales.
Años atras lograron renovar sus trajes, gracias al apoyo de Adesca, Guatemala.
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